un día como otros, pero con un significado especial

20 de julio. Día de amigo.
Desde chiquita me cautivó esta fecha.
En la primaria lo festejaba organizando Pijamas parties, en el que el living de mi casa se transformaba en escenario de delirantes juegos y secretas confesiones...
En la secundaria lo celebrabamos con rituales de Té, sentadas al rededor de la larga mesa del comedor, disfrutábamos de los exquisitos banquetes, mientras manteníamos conversaciones cuasi adultas e intentabamos resolver nuestro universo de problemas...
Se terminó el colegio, pero los festejos seguían y al mismo tiempo se multiplicaban...
Comencé a tener variados grupos de amigos, con unos cenabamos la noche ántes, con otros el mismo día, a otros los veía el fin de semana y seguramente a todos les escribía tarjetas o cartitas, que iban acompañadas de algún pequeño regalito...
Mis amigos crecieron conmigo, algunos me acompañan desde hace 25 años, los fui acumulando con el tiempo, y cada uno tiene asegurado un espacio específico en mi cielo de estrellas.
Sin ellos, yo no sería yo. Fueron y son los protagonistas principales de muchas de mis historias. Responsables de la mayoría de mis alegrías. Cómplices y promotores de aventuras. Hermanos elegidos, y en muchos casos almas gemelas.
Algunos llegaron hace relativamente poco para revolucionarn mi universo llenándolo de luz.
Otros, con el tiempo se fueron lejos, y aún así la distancia no logra opacar el sentimiento de pertenencia y comunión.
Por los que están mas cerca que nuca, por los que están desde siempre, por los que me comprenden con tan solo mirarme, por los que lloran conmigo, por los que me contagian su risa, por los que cuentan conmigo, por los que estan cerca estando lejos, por los que me hacen una mejor persona.
Por todos ellos quiero brindar esta noche.
Desde aqui, mi pequeño homenaje para ustedes que me alimentan.